Los peces sienten.
Una de las ideas del especismo es que unos animales sienten menos que otros, o que su dolor y su muerte importa menos.
Uno de estos grupos son los peces y otros animales marinos.
Tal vez porque no les escuchamos gritar cuando los capturan con una red, o les clavan un anzuelo en la boca; cuando les sacan al aire y se ahogan durante minutos por falta de agua; aunque les vemos retorcerse y luchar por su vida, no nos dan tanta pena como un mamífero desangrándose.
Tal vez precisamente porque no son mamíferos, los vemos muy diferentes a nosotros y nosotras, no nos inspiran la ternura de la carita con ojos grandes de un perrito o perrita, o una gata o gato.
Tal vez porque creemos que no piensan, que son como autómatas, que sus reacciones y movimientos son puramente mecánicos o instintivos; no nos damos cuenta de que tienen cerebro y sistema nervioso, de que sienten miedo, hambre, dolor.
Incluso llegamos a COMER VIVOS algunos animales marinos, como las ostras (después de echarles un chorrito de limón). ¿Nos imaginamos echar limón a un hámster y comerlo vivo?
Otros los COCINAMOS VIVOS, como las langostas, aunque en algunos países ya se ha prohibido... (cocinarlos vivos, no comerlos).
Incluso existen las personas "piscitarianas", que son aquellas que no comen carne pero sí pescado; otra prueba del especismo (aunque muchas de estas personas terminan siendo vegetarianas).
En algunos círculos está "bien vista" la pesca deportiva: pescar por diversión y luego devolver los peces al agua, defendiendo que no se les hace ningún mal; es cierto que no se les mata... directamente; pero aparte de que ya han sufrido con la captura, el taladrado y el tirón a su piel, y el sentimiento de no poder respirar, no se les devuelve al agua sanos, sino con las heridas de su captura, pueden morir pronto desangrados o más lentamente por infección. A nadie se le ocurriría decir que está bien visto cazar con lanzas un jabalí o un ciervo, pero que luego se les quita la lanza y se les vuelve a soltar en el bosque.
Sólo en piscifactorías se crían cada año 120 mil millones de peces. Más las toneladas que se capturan en el mar. Algunas de las especies están al borde del peligro de extinción, o directamente extinguidas.
Por otro lado, ahora que se habla tanto de "bienestar animal": los peces ni siquiera tienen una ley que les proteja, más que unas cuotas de captura, por lo que sufren mucho más; por ejemplo, no hay que aturdirlos previamente a matarlos, por lo que literalmente suelen morir ahogados tras una agonía; en las piscifactorías está permitido matarlos de cualquier forma, incluso a golpes.
Les damos tan poca importancia que, los peces destinados a su consumo, se cuentan en toneladas mundialmente en vez de unidades. Además, pensamos que han pasado toda su vida en el mar, libres, pero la verdad es que la mitad de pescado que consumimos es fruto de piscifactorías.
Algunas de las principales formas de sufrimiento a las que les sometemos son:
1. La agonía de explotar por dentro: Al ser elevados rápidamente desde el mar, los peces sufren descompresión y por eso sus ojos estallan al igual que sus órganos internos que se les salen por la boca.
2. Pesca de arrastre: con grandes redes se recolecta toooodo lo que entran en ellas, todo tipo de peces: puedan ser vendidos o no todos acaban muertos.
3. Uno de los más crueles consiste en empalar a los peces vivos como cebo para otros peces. Los investigadores de Igualdad animal registraron cómo los trabajadores atraviesan a los peces con ganchos para ser alzados por los barcos o para que se desangren, y también como los destripan o decapitan mientras están plenamente conscientes.
4. Muerte por electrocución y golpes en piscifactorías.
La pesca es una de los principales causantes de la pérdida de biodiversidad marina. Por ejemplo, el salmón de piscifactoría requiere cinco kilos de peces salvajes capturados en el mar [pero de escaso valor en el mercado] para obtener un solo kilo de pescado con valor comercial.
Más información:
https://www.animanaturalis.org/p/1405/los-peces-sienten-dolor
http://www.animanaturalis.org/p/763
https://www.animanaturalis.org/p/1146/sienten-dolor-las-langostas
http://www.igualdadanimal.org/noticias/7797/6-hechos-por-los-cuales-podrias-no-querer-volver-comer-mas-nunca-pescado
http://www.igualdadanimal.org/entretenimiento/pesca
http://www.igualdadanimal.org/noticias/7777/pesca-industrial-y-maltrato-animal
https://www.abc.es/ciencia/20140618/abci-peces-tambien-sienten-dolor-201406181047.html
Una de las ideas del especismo es que unos animales sienten menos que otros, o que su dolor y su muerte importa menos.
Uno de estos grupos son los peces y otros animales marinos.
Tal vez porque no les escuchamos gritar cuando los capturan con una red, o les clavan un anzuelo en la boca; cuando les sacan al aire y se ahogan durante minutos por falta de agua; aunque les vemos retorcerse y luchar por su vida, no nos dan tanta pena como un mamífero desangrándose.
Tal vez precisamente porque no son mamíferos, los vemos muy diferentes a nosotros y nosotras, no nos inspiran la ternura de la carita con ojos grandes de un perrito o perrita, o una gata o gato.
Tal vez porque creemos que no piensan, que son como autómatas, que sus reacciones y movimientos son puramente mecánicos o instintivos; no nos damos cuenta de que tienen cerebro y sistema nervioso, de que sienten miedo, hambre, dolor.
Incluso llegamos a COMER VIVOS algunos animales marinos, como las ostras (después de echarles un chorrito de limón). ¿Nos imaginamos echar limón a un hámster y comerlo vivo?
Otros los COCINAMOS VIVOS, como las langostas, aunque en algunos países ya se ha prohibido... (cocinarlos vivos, no comerlos).
Incluso existen las personas "piscitarianas", que son aquellas que no comen carne pero sí pescado; otra prueba del especismo (aunque muchas de estas personas terminan siendo vegetarianas).
En algunos círculos está "bien vista" la pesca deportiva: pescar por diversión y luego devolver los peces al agua, defendiendo que no se les hace ningún mal; es cierto que no se les mata... directamente; pero aparte de que ya han sufrido con la captura, el taladrado y el tirón a su piel, y el sentimiento de no poder respirar, no se les devuelve al agua sanos, sino con las heridas de su captura, pueden morir pronto desangrados o más lentamente por infección. A nadie se le ocurriría decir que está bien visto cazar con lanzas un jabalí o un ciervo, pero que luego se les quita la lanza y se les vuelve a soltar en el bosque.
Sólo en piscifactorías se crían cada año 120 mil millones de peces. Más las toneladas que se capturan en el mar. Algunas de las especies están al borde del peligro de extinción, o directamente extinguidas.
Por otro lado, ahora que se habla tanto de "bienestar animal": los peces ni siquiera tienen una ley que les proteja, más que unas cuotas de captura, por lo que sufren mucho más; por ejemplo, no hay que aturdirlos previamente a matarlos, por lo que literalmente suelen morir ahogados tras una agonía; en las piscifactorías está permitido matarlos de cualquier forma, incluso a golpes.
Les damos tan poca importancia que, los peces destinados a su consumo, se cuentan en toneladas mundialmente en vez de unidades. Además, pensamos que han pasado toda su vida en el mar, libres, pero la verdad es que la mitad de pescado que consumimos es fruto de piscifactorías.
Algunas de las principales formas de sufrimiento a las que les sometemos son:
1. La agonía de explotar por dentro: Al ser elevados rápidamente desde el mar, los peces sufren descompresión y por eso sus ojos estallan al igual que sus órganos internos que se les salen por la boca.
2. Pesca de arrastre: con grandes redes se recolecta toooodo lo que entran en ellas, todo tipo de peces: puedan ser vendidos o no todos acaban muertos.
3. Uno de los más crueles consiste en empalar a los peces vivos como cebo para otros peces. Los investigadores de Igualdad animal registraron cómo los trabajadores atraviesan a los peces con ganchos para ser alzados por los barcos o para que se desangren, y también como los destripan o decapitan mientras están plenamente conscientes.
4. Muerte por electrocución y golpes en piscifactorías.
La pesca es una de los principales causantes de la pérdida de biodiversidad marina. Por ejemplo, el salmón de piscifactoría requiere cinco kilos de peces salvajes capturados en el mar [pero de escaso valor en el mercado] para obtener un solo kilo de pescado con valor comercial.
Más información:
https://www.animanaturalis.org/p/1405/los-peces-sienten-dolor
http://www.animanaturalis.org/p/763
https://www.animanaturalis.org/p/1146/sienten-dolor-las-langostas
http://www.igualdadanimal.org/noticias/7797/6-hechos-por-los-cuales-podrias-no-querer-volver-comer-mas-nunca-pescado
http://www.igualdadanimal.org/entretenimiento/pesca
http://www.igualdadanimal.org/noticias/7777/pesca-industrial-y-maltrato-animal
https://www.abc.es/ciencia/20140618/abci-peces-tambien-sienten-dolor-201406181047.html
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